Las canteras de granito

¿Qué es el granito?

El granito es un aglomerado de cristales de cuarzo, feldespato y lentejuelas de mica. Este conjunto de granos, del latín "granum" dio el nombre de granito. En francés, tenemos dos grafías de la palabra granito para dos contextos diferentes: -"granit" para los canteros y los arquitectos -"granite" para los geólogos

Los orígenes del granito

El granito es una roca eruptiva que surge de las profundidades magmáticas de la tierra. Con las grietas que se forman en la corteza terrestre, bajo la fuerte presión del magma, el granito alcanza la superficie del globo creando los volcanes. Sin embargo, es sólo cuando el magma detiene su ascenso hacia la superficie que se convierte en granito, una especie de volcán "abortado". Entonces, el granito se formó en el Trégor desde hace 300 millones de años cuando un enorme hueco de magma se formó bajo tierra a 4 o 5 km de profundidad, de Trébeurden a Ploumanac’ h. Unos cientos de miles de años después, el magma se enfrió por completo. Este largo enfriamiento favoreció la formación de cristales de minerales. Más el enfriamiento es largo, más estos granos de minerales son grandes. Nuestro granito se hizo visible gracias a la erosión progresiva del suelo, descubriendo así las rocas escondidas en la profundidad de la tierra.

Los macizos graníticos del Trégor
Hay tres macizos de granito diferentes:
- El macizo que conecta Perros-Guirec y Bréhat (el más antiguo)
- El macizo de Plouaret
- El macizo que se extiende de Ploumanac’h a Trébeurden con 3 tipos de granito: El granito de "La Clarté" (grandes feldespatos de rosa a rojo), el granito azul y blanco de la Île-Grande

Un poco de historia
- Hace 6000 a 6500 años, elevación de los primeros megalos Por ejemplo: los dolmenes de la isla Bono" y de Trébeurden, los menhires de Pleumeur-Bodou y las galerias cubiertas de Trégastel y de la Île-Grande.
- Unos milenios más tarde, las estelas galas de Trébeurden o Plestin-les Grèves
- Del siglo XII al XVII, construcción de capillas e iglesias Ej: Catedral de Tréguier construida con granito de Ile-Grande Construcción de casas de granito hasta el siglo XX
- Siglo XIX: la industria y el comercio se desarrollan Construcción de casas, fábricas, muelles, faros, puentes, viaductos, adoquines de calle,…

Minería de granito en la Île-Grande

El éxito del granito de la Île-Grande proviene, en primer lugar, de su innegable aspecto práctico: gracias a su situación insular, sus reservas graníticas son de fácil acceso e inmediatamente disponibles. Además, como la mayoría de los islotes de la Île-Grande eran inhabitados, no había ninguna dificultad de extracción en los sitios. Por fin, los granitos de la Île-Grande tienen una gran calidad y diversidad. Desde un punto de vista regional, es en estos lugares que las extracciones fueron más activas de la segunda parte del siglo XIX hasta los principios del siglo XX y estas 14 hectáreas de canteras son el ejemplo más bello de extracción de granito junto al mar ...

A finales del Medioevo y durante el Renacimiento, la extracción del granito de la Île-Grande era necesaria para la construcción de iglesias, pero seguía siendo marginal. A partir de 1827 el Concejo Municipal, preocupado por preservar la viabilidad de los caminos y controlar la extracción "informal", mientras seguir con los beneficios de este comercio, decidió legislar sobre la extracción del granito. A partir de 1950, los arrecifes y las pequeñas islas del archipiélago fueron arrendados a operadores por períodos sucesivos de 6 a 9 años. Los canteros venían de todas partes, en particular de las islas Chausey y del Cotentin. Entre los años 1860 y 1910, la población dobló. Durante cincuenta años, la extracción del granito, aproximadamente de 800 toneladas al día, estuve a su apogeo en la Île-Grande que se convertió en “la isla de los canteros”. Adoquines, bordillos, muros de muelles y más, los granitos de la Île-Grande se exportaron a las costas del Canal de la Mancha y del Atlántico. Los granitos desembarcados en puertos como Caen, Cherburgo, Boulogne, Dunkerque, Burdeos o Bayona, se utilizaban en parte localmente, aunque se transportasen a muchas regiones del interior como Le Havre, Rouen, París, Pau, Lourdes, etc. En Bretaña, se utilizaban para la construcción del faro de Héaux en Bréhat, del viaducto de Morlaix, del faro de los Triagoz, de la iglesia de Louannec, de la estación y del acueducto de Saint-Brieuc, del quai de Portrieux, del viaducto de Lézardrieux y más.

Algunas grandes carreras

- Esta antigua cantera de granito es uno de los yacimientos más importante de Bretaña, tanto por su tamaño como por el volumen de las extracciones. Un muro todavía hoy visible fue construido para proteger el yacimiento de los daños que pudiese causar el mar. Los granitos blancos, azules y grises se extrajeron a partir de 1908 hasta 1979, el año en el que se acabó la explotación. La cantera terminó ser cedida a la Liga para la Protección de los Párajos (LPO).
- Toul ar Staon La punta de Toul ar Staon es una lengua de roca al oeste de la Île-Grande donde la extracción fue intensa desde el comienzo del siglo XIX hasta finales de los años 40. Todavía se puede ver las ruinas de las antiguas casas de los pescadores de agua marinas, transformadas en un albergue juvenil que fue bombardeado por los alemanes durante la Segunda Guerra Mundial.
- La cantera de Roïc está ubicada frente a la galería cubierta, esta cantera no solo contaba con un sitio de extracción sino también con un área de almacenamiento y un taller de talla.
- La carrera Brintec’h era un yacimiento de extracción que se cubre de agua cuando el mar es alto. En la carrera Brintec’ h, del nombre de su explotador, se extractó el granito azul de 1930 a 1960.
- La isla Corbeau" (Enez Vran) La isla conserva las huellas de una intensa extracción del granito azul con mica negra o gris. Por eso, se construyó una fragua en la parte plana del sitio. Solo los habitantes de la Île-Grande tenían el derecho de extracción. El único inconveniente era el transporte del granito a un muelle de carga.
- Las islas del oeste Agathon: Cuentan con una de las mayores carreras en una isla, con un ferrocarril para el cargamento de las piedras. Quedan las ruinas de la fragua y los refugios. La isla Losquet: Fue un lugar de extracción intensiva. Hoy en día, concentra los equipos de France Telecom. La isla Fougère": elegida para abastecer el viaducto de Morlaix entre otras cosas, quedan restos de un muelle y construcciones.
- Las islas del este la isla Morvil": caracterizada por la extracción del granito azul, esta isla sirvió para la construcción del faro de los Héaux de Bréhat. La isla Plate e la isla de Aval": también famosas por su granito azul. La isla Jaouen: también suministró el viaducto de Morlaix.

El transporte del granito

Durante mucho tiempo, los "Bricks", las goletas o las barcazas, que se cargaban durante la marea baja, eran los únicos medios de transporte capaces de transportar los bloques de granito. Cuando estos barcos no podían acostar, se utilizaba el "cuco", una especie de pequeña barca-pozo que podía levantar bloques de 7000 kilos elevada por la marea alta y así transportar el granito hasta los barcos más grandes. Pero la navegación en medio de los escollos es peligrosa y numerosos barcos como “la Providencia” o “la Mathilde” se encallaron en los alrededores de la costa. Por fin, en 1907, los canteros construyeron ellos-mismos un muelle de embarque sobre carril en el actual puerto de Saint-Sauveur. Enviados por pequeños trenes de las distintas carreras de la Île-Grande, los bloques de granito se embarcaban en las gabarras o en otros barcos, transportados hasta el muelle del Leguer y luego transportados con carretilla hasta la estación de Lannion.

La vida de los canteros

La extracción del granito y la vida cotidiana de los canteros son cosas radicalmente diferentes. Y finalmente, más que el aspecto industrial o artesanal, son los recursos humanos los que determinan la verdadera identidad de un lugar o un municipio. Las condiciones de vida y de trabajo de estos hombres eran muy difíciles. En la Île-Grande, los hijos eran marineros o canteros, según la elección de su padre. Y para estos hijos era mejor embarcar en un barco que ser cantero, una profesión que era más dura y mucho menos popular. Por lo tanto, a la edad de 12-13 años, se convertían en grumetes o en aprendices de cantero. Independientemente del clima y de la temperatura exterior, tenías que ir a trabajar. Fue solo cuando las condiciones climáticas eran extremas que los trabajadores de la cantera que trabajaban en los islotes se volvieron a casa. La fuerza de la lluvia, el viento y la niebla les impidieron llegar a su lugar de trabajo. Cuando realmente hacía demasiado frío, los canteros iban a calentarse en un rincón del hogar de la fragua y bebían un plato de sopa caliente. Las mujeres les trajeron la comida del mediodía cuando la marea lo permitía: patatas, sopa de pan, tocino, bígaros, lapas, y para beber aguardientes y "piquette", bebida a base de rodajas de manzanas hervidas. La mayor parte del tiempo, los canteros eran remunerados por unidad de obra con un salario a menudo irrisorio, de 4 a 7 francos (máximo excepcional, aplicado solo en la isla Fougère) por día (entre 0.80€ y 1.40€/día) Los obreros tenían que trabajar durante aproximadamente 12 horas por día para un salario mísero, sobretodo en verano ya que el sol se pone tarde. Finalmente, los gajes del oficio no eran despreciables. Tallador, cortador, pulidor o herrero, nadie estaba a salvo de un accidente.

Frente a estas duras condiciones de trabajo, la Île-Grande estaba, y está, orgullosa del valor y del mérito de sus canteros, que han dejado huellas de un recuerdo imperecedero en cada bloque de granito de la península.

El fin de las carreras

A partir de 1914, el inicio de la Primera Guerra Mundial movilizó a muchos hombres lo que provocó una escasez de mano de obra. Cuando terminó la guerra, los canteros siguieron siendo escasos y la demanda de granito cayó junto con los salarios. Unos pocos trabajadores dejaron las explotaciones de la Île-Grande alrededor de 1930 para trabajar en otras canteras, en particular la de La Clarté, donde estaban mejor pagados. El 16 de agosto de 1936 (victoria del Frente Popular), los trabajadores organizaron una huelga de cinco semanas tras la cual obtuvieron un aumento salarial de sólo 10 centavos. Después de muchos conflictos de interés, para la mayoría políticos, y con la era del asfalto empezó la decadencia final de las carreras de la Île-Grande cuya extracción cesó completamente en 1989.

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Más info "Les Carrières de l’Île-Grande"

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